En defensa de "Laboral Centro de Arte y Creación Industrial". En apoyo del proyecto y del colectivo de trabajadores.

La preocupación por el futuro de Laboral Centro de Arte y Creación Industrial nos mueve a hacer públicas estas reflexiones, además de a buscar adhesión a las mismas. Las exponemos con el propósito de analizar los antecedentes que han llevado a esta situación que pensamos crítica, a la par que garantizar la preservación de los puestos de trabajo y la supervivencia del proyecto vigente.

Cuando todavía no se han celebrado los primeros diez años, Laboral Centro de Arte, vive sus horas más difíciles, aquejado de falta de compromiso institucional, con trabajadores que ven amenazado su futuro, con una Fundación que muestra debilidad a la hora de afrontar los mayores desafíos y con una insólita falta de complicidad política, que por sí sola, de existir, bastaría para solucionar la mayoría de los problemas.

Paradójicamente el Centro vive en otros aspectos sus horas más fructíferas ya que en el capítulo de las relaciones internacionales muchos esfuerzos comienzan a dar sus esperados frutos. Se inicia una nueva etapa en la que la posibilidad de explorar otras oportunidades fuera delos límites del estado español es por primera vez real, facilitando, al fin, la salida al campo internacional de los proyectos creativos, tan necesaria en el caso del arte asturiano, por ser esta una de sus carencias endémicas. Laboral se convierte por lo tanto en la herramienta que sirve de base tecnológica sobre la que impulsar y desarrollar proyectos artísticos y, a la vez, en la vía abierta para la exposición internacional de los mismos.

Como resultado del trabajo en el terreno educativo, el Centro de Arte, ve también consolidados multitud de programas pedagógicos, llevados a cabo con la participación de centros escolares y asociaciones, entre los que se incluyen niños en peligro de exclusión social, o mujeres maltratadas, que participan de la creación artística como una oportunidad de desarrollo en sus vidas, lo que contribuye enormemente a afianzar la prevalencia de los valores solidarios y a acercar, precisamente a los que más lo necesitan, las virtudes transformadoras y enriquecedoras del arte, a través del uso compartido de los recursos del complejo, dando sentido al compromiso de una creación industrial con aplicaciones tangibles para la ciudadanía. Romper las barreras del arte y contribuir con ello al desarrollo es una de las máximas que persiguen estos programas que, en la práctica, están resultando tan exitosos. En este terreno no se puede dejar de lado la variedad de cursos y talleres que impulsa la Institución, facilitando el acceso a todas las tecnologías punteras, de manera abierta y democratizadora.

Si ponemos el acento en el arte asturiano hemos de destacar que en nuestra comunidad autónoma no existen precedentes de la puesta en marcha de unas instalaciones dotadas de recursos tecnológicos de vanguardia puestas a disposición de los artistas, que las utilizan a diario, para desarrollar sus ideas. No caben más que elogios a la facilidad que esto representa y a la utilidad incuestionable que supone. Algo que convierte a Laboral en una base imprescindible, que contribuye con eficacia a la realización de las obras de arte que partiendo de Asturies exhiben en salas de exposiciones, museos, ferias, teatros y festivales del mundo. Hace mucho que Laboral ha abierto sus puertas, en forma de multitud de Residencias, facilitando que el tejido creativo, trabaje utilizando sus abundantes medios.

Laboral Centro de Arte es pues una instalación de primera magnitud que, de contar con el apoyo necesario, sería uno de los mejores ejemplos de política en favor del I+D. Su proyecto es también fuente de riqueza en el tejido económico y resultaría una torpeza no darse cuenta de su potencialidad como elemento importante para nuestro PIB si se apoyase con fuerza el proyecto vigente. A la realidad de los logros alcanzados con esfuerzo, se contrapone una inusitada torpeza y ceguera política que se convierten en alarmantes con el despido, la semana pasada, de dos trabajadores del centro: Sergio Redruello y Alfredo Aracil. Si a esto sumamos el reciente cese de Diego Ugalde, queda patente que la intención que subyace tras estas actuaciones, no es otra que el desmantelamiento paulatino de la instalación. La capacidad técnica e intelectual de los despedidos es incuestionable y una política cultural que se desarrollase dentro de un marco de normalidad no debería procurar su cese ni prescindir de profesionales de tal calidad.

Urge pues que la complicidad con el proyecto de Laboral se restablezca de manera seria y continuada, que nuestros políticos conozcan su importancia capital en la producción del arte en Asturies, que se refuercen las inversiones para el mantenimiento de las instalaciones y se readmitan a los trabajadores despedidos.

#Firmantes José Álvarez López Pedro José Álvarez Menchaca Javier Ávila Cristina Busto Álvarez Susana Carro Fernández María Castellanos Vicente Cristina Cipitria Castro Adrián Cuervo María Fernández Álvarez Pablo Fernández Sánchez Chantal Franco Vidal Ángel González Rodríguez Eduardo Guerra Andie Gracie Fernando Gutiérrez Nel Caamaño Pablo Und Destruktion Rodolfo Lillo Roberto Lobo Rodríguez Paco Nadie Juanjo Palacios Natalia Pastor Roxana Popelka Blanca Prendes Elena de la Puente Ester Roldán Calvo Ernesto Avelino Sáez Eugenio Tejón Patricia Toral Román Torre Alberto Valverde García Jordi Vall Lamora